¿Qué pasa si el sistema de recompensas no funciona?

Muchos padres creen que el sistema de recompensas debe funcionar de inmediato para modificar la conducta del niño. Es importante recordar que se necesita tiempo para que las conductas cambien. Se necesita tiempo para que el sistema de recompensas funcione. Si tiene paciencia y constancia en lo que hace, verá un aumento en los buenos comportamientos de su hijo. También verá que, con el tiempo, disminuyen las malas conductas.

¿Qué debe hacer si el sistema de recompensas no está funcionando? Hay tres cosas que puede analizar y, tal vez, modificar:

1. Piense en lo que espera de su hijo. Pregúntese: ¿Puede mi hijo tener la conducta que deseo que tenga? Si decide que sus exigencias son demasiado altas, puede hacerle cambios al sistema. Asegúrese de explicarle al niño la razón del cambio. Por ejemplo, si esperaba que su hijo tendiera la cama, pero se da cuenta de que él no puede hacerlo, podría decir: “Me di cuenta de que debería recompensarte por ayudarme a hacer la cama. Por lo tanto, de ahora en adelante recibirás un premio cuando me ayudes a tender la cama”.
2. También es posible que el sistema de recompensas no funcione bien si la conducta no es específica, clara o fácil de entender para su hijo. Pregúntese: ¿Es específica la conducta? ¿Entiende mi hijo lo que espero de él? Si el niño no tiene la conducta que usted espera, es señal de que tal vez no entiende lo que usted desea que haga. A medida que crezca, puede ver si su hijo entiende al pedirle que le diga lo que tiene que hacer para obtener una recompensa. Recuerde que las conductas deben ser específicas y fáciles de ver. Deben ser simples para los niños pequeños. Haga clic aquí para obtener información sobre cómo elegir las conductas para premiar.
3. Los sistemas de recompensas pueden no funcionar si los premios no son cosas que a su hijo le interese ganar. Pregúntese: ¿A mi hijo le gusta la recompensa que le estoy ofreciendo? ¿Le gustan más otros tipos de premios? Recuerde que lo que a usted le gusta puede no ser lo que a él le gustaría obtener. Los niños también se cansan de ciertas recompensas y desarrollan nuevos gustos e intereses. Mantenga una lista actualizada de premios que le gustarían a su hijo. Cambie y agregue cosas a medida que pase el tiempo para que sigan siendo divertidas e interesantes. Haga clic aquí para obtener información sobre tipos de recompensas.