Uso de consecuencias contra la mala conducta
Una consecuencia es lo que sucede en forma inmediata después de una conducta. Las consecuencias pueden ser tanto positivas como negativas. Las consecuencias positivas le demuestran a su hijo que ha hecho algo que a usted le agrada. Cuando usted usa una consecuencia positiva, es más probable que su hijo repita esa conducta. Las consecuencias negativas le hacen saber a su hijo que a usted no le agrada lo que ha hecho. Es menos probable que el niño repita esa conducta si usa una consecuencia negativa. A las consecuencias negativas también se les llama medidas disciplinarias. Haga clic aquí para obtener más información sobre las consecuencias positivas y negativas.
A continuación, se mencionan los cinco pasos para usar consecuencias con el fin de detener una mala conducta.
Paso 1: Identifique la mala conducta.
Paso 3: Aplique una consecuencia.
Paso 5: Regrese a la comunicación positiva.