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Elogio e imitación
Elogio
Usted le da un elogio a su hijo cuando le da atención positiva por algo bueno. Es útil para mejorar el comportamiento de los niños pequeños, fortalecer la relación entre padres e hijos y aumentar la comunicación.
¿Por qué dar elogios es una buena herramienta?
Los elogios le indican a su hijo cuáles son los comportamientos que a usted le gustan. Si elogia los comportamientos que le gustan, su hijo los repetirá con más frecuencia. Los elogios también pueden ayudar a su hijo a sentirse bien consigo mismo.
Los elogios descriptivos son los que funcionan mejor porque le indican a su hijo exactamente qué es lo que a usted le gusta. Este tipo de elogio se denomina “elogio específico”. Al contrario, los elogios no específicos son los comentarios generales que demuestran aprobación o afecto. Los elogios no específicos pueden ayudar a los niños a sentirse bien, pero no mejoran su comportamiento, ya que no le indican a su hijo exactamente qué es lo que a usted le gusta.
Elogio no específico
¡Muy bien!
¡Fantástico!
¡Así se hace!
Elogio específico
¡Acomodaste los juguetes muy bien!
¡Hiciste un trabajo fantástico para hacer la cama!
¡Así se hace! ¡Qué bien que compartes con tu hermano!
Consejos para dar elogios
- A veces es mejor dar elogios específicos cuando no se los espera. Si su hijo está jugando tranquilamente en la sala mientras usted prepara la cena, tómese el tiempo de decirle que le gusta cómo está jugando. Podría decir: “Me gusta tanto cuando juegas solito, tranquilo en la sala, mientras yo preparo la cena”. Esto le enviará el mensaje de que usted está prestando atención.
- Darle un abrazo, “chocar cinco” o darle una caricia en la cabeza o en el hombro cuando le da el elogio lo puede hacer más poderoso.
- Algunos padres notan que el comportamiento de sus hijos empeora cuando los elogian. Haga clic aquí para saber qué dicen los expertos en crianza acerca de cómo abordar este problema.
- A algunos padres les resulta difícil encontrar qué elogiar en el comportamiento de sus hijos. Haga clic aquí para aprender de los expertos en crianza algunas maneras de abordar este problema.
Imitación
Usted imita el comportamiento de su hijo cuando copia o se pone a hacer lo mismo que él. Esto significa jugar con el mismo juguete (o uno similar), e intentar jugar de la misma manera. La imitación ayuda a dar atención positiva para mejorar el comportamiento de su hijo, su relación con él y su comunicación con él.
¿Por qué es la imitación una buena herramienta?
Los comportamientos que usted imite probablemente serán repetidos por su hijo. Cuando usted imita su forma de jugar, le demuestra que está prestando atención y que le gusta cómo está jugando. La imitación puede ayudar a los niños a sentirse bien consigo mismos y le ofrece a usted muchas oportunidades de darle atención positiva.
Consejos para la imitación
- Cuando imite a su hijo, haga la misma actividad que él. Trate de no hacerla mejor ni más rápido, ya que esto podría desalentarlo y hacerlo sentirse mal consigo mismo.
- Lo que usted imite es probable que se repetirá en el futuro. Es mejor modelar o demostrar comportamientos positivos o apropiados, e imitar las cosas que su hijo hace que a usted le gustan. Si imita comportamientos o palabras que no son apropiados, es más probable que su hijo los repita. Puede ignorar las palabras y los comportamientos inapropiados siempre que no pongan a nadie en peligro o que no sean destructivos. Si su hijo está haciendo algo peligroso o destructivo, detenga ese comportamiento de inmediato.
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