Volumen 5: Nº 2, abril 2008
ESTUDIO DE CASO COMUNITARIO
Estrategias para controlar la presión arterial en poblaciones de bajos ingresos de Georgia
Roberta Constantine, PhD, J. Nell Brownstein, PhD, Sonja Hoover, MPP, Lashawn Wordlaw-Stinson, PhD, Diane Orenstein, PhD, Patricia Jones, RN, CDE, Rosanne Farris, PhD
Citas sugeridas para este artículo: Constantine R, Brownstein JN, Hoover S, Wordlaw-Stinson L, Orenstein D, Jones P, et al. Estrategias para controlar la presión arterial en poblaciones de bajos ingresos de Georgia. Prev Chronic Dis 2008;5(2).
http://www.cdc.gov/pcd/issues/2008/
apr/07_0200_es.htm. Visitado [fecha].
REVISIÓN PARITARIA
Resumen
Antecedentes
Se estima que en Georgia el 32% de los negros y el 28% de los blancos tienen presión arterial alta. En 2004 la tasa de mortalidad por accidentes cerebrovasculares en Georgia fue 12% más alta que la media nacional. Los negros de este estado tienen una tasa de mortalidad por accidentes cerebrovasculares 1,4 veces más alta que los blancos.
Contexto
El cuerpo legislativo de Georgia financia el Programa de Prevención de Enfermedades Cardíacas y Accidentes Cerebrovasculares (SHAPP, por sus siglas en inglés) para brindar tratamiento y medicamentos a las personas en situación de indigencia de Georgia. La tasa mediana de control de la presión arterial (PA) de los participantes del programa SHAPP es de aproximadamente 60%, frente a la media nacional del 35%.
Métodos
Para evaluar el programa SHAPP se entrevistó a funcionarios administrativos y de la salud, y se realizaron grupos focales con pacientes de dos clínicas.
Consecuencias
Como consecuencia, los pacientes aprendieron sobre su propia presión arterial, tomaron los medicamentos con más constancia y acudieron con más frecuencia a las consultas médicas.
Interpretación
Podemos destacar como componentes exitosos del programa: un proceso de inscripción sencillo; medicamentos a un precio accesible; uso de protocolos y de sistemas de control de pacientes documentados y basados en la evidencia; seguimiento de rutina de los pacientes; y una comunicación efectiva entre los pacientes y el personal de la clínica. También se identificaron los principales desafíos y se hicieron recomendaciones para mejorar la efectividad el
programa.