Volumen 4: Nº 1, enero 2007
INVESTIGACIÓN ORIGINAL
Estilo de vida y conductas saludables en las personas mayores con y sin discapacidades en los Estados Unidos, Sistema de Vigilancia de los Factores Conductuales de Riesgo, 2003
Lisa C. McGuire, PhD, Tara W. Strine, MPH, Catherine A. Okoro, MS, Indu B. Ahluwalia, MPH, PhD, Earl S. Ford, MD, MPH
Citas sugeridas para este artículo: McGuire LC, Strine TW, Okoro CA, Ahluwalia IB, Ford ES.Estilo de vida y conductas saludables en las personas mayores con y sin discapacidades en los Estados Unidos, Sistema de Vigilancia de los Factores Conductuales de Riesgo, 2003. Prev Chronic Dis [serie publicada on-line] Enero 2007 [fecha de la cita]. Disponible en:
http://www.cdc.gov/pcd/issues/2007/
jan/06_0029_es.htm.
REVISIÓN PARITARIA
Resumen
Introducción
Actualmente se cuenta con poca información sobre la relación entre las conductas saludables y la prevalencia de enfermedades crónicas en los adultos mayores con discapacidades. Este estudio analiza la prevalencia de ciertas conductas saludables vinculadas a las enfermedades crónicas de los adultos de 65 años o más, con y sin discapacidades.
Métodos
Se utilizaron los datos del Sistema de Vigilancia de los Factores de Conductuales Riesgo (BRFSS) de 2003 para evaluar el peso de los participantes y otras seis conductas vinculadas a la salud:hábito de fumar, consumo de al menos una bebida alcohólica por día, consumo de al menos cinco frutas o verduras por día, actividad física durante una semana tipo, vacunación
contra la gripe en el último año, e inmunización de por vida contra las enfermedades neumocócicas.
Resultados
Las personas con alguna discapacidad eran menos propensas que las personas sin discapacidades a tener un peso saludable (28,5% vs. 37,2%) y a realizar el nivel de actividad física semanal recomendado (14,7% vs. 26,2%). Sin embargo, las personas con discapacidades eran más propensas que las personas sin discapacidades a no fumar (91,8% vs. 89,9%), a consumir hasta una bebida
alcohólica por día (95,1% vs. 91,5%), a haber recibido la vacuna contra la gripe en el último año (72,7% vs. 69,0%) y a haber sido inmunizados de por vida contra las enfermedades neumocócicas (72,1% vs. 63,0%). No se observó ninguna diferencia entre las personas con y sin discapacidades en las tasas de prevalencia del consumo de al menos cinco frutas o verduras por
día.
Conclusión
La prevalencia de tener un peso saludable y seis hábitos vinculados a las enfermedades crónicas en adultos de 65 años o más, varía según tengan o no alguna discapacidad y según el hábito modificable específico. En todas las visitas médicas se debería evaluar a los adultos mayores con y sin discapacidades y aconsejarlos sobre conductas
saludables para reducir potencialmente las tasas de morbilidad y mortalidad vinculadas a las enfermedades crónicas en los años más avanzados.