Volumen 3: Nº 3, julio 2006
INVESTIGACIÓN ORIGINAL
El papel de la raza y de la pobreza en el acceso a alimentos apropiados para cumplir con las recomendaciones alimenticias
Elizabeth A. Baker, PhD, MPH, Mario Schootman, PhD, Ellen Barnidge, MPH, Cheryl Kelly, MPH
Citas sugeridas para este artículo:Baker EA, Schootman M, Barnidge E, Kelly C. El papel de la raza y de la pobreza en el acceso a alimentos que apropiados para cumplir con las recomendaciones alimenticias. Prev Chronic Dis [serie publicada on-line] julio 2006 [fecha de la cita]. Disponible en:
URL: http://www.cdc.gov/pcd/issues/2006/
jul/05_0217_es.htm.
REVISIÓN PARITARIA
Resumen
Introducción
En vista del aumento de la obesidad y las disparidades que hay, en lo que respecta a obesidad y a su relación con enfermedades crónicas, entre grupos de diversas razas, etnias e ingresos, los investigadores se han centrado en los aspectos sociales y ambientales que afectan la ingesta de alimentos. La pregunta que se planteó al inicio de este estudio fue si todas las comunidades
podían acceder de forma equitativa a los alimentos que le permiten a una persona optar por una dieta saludable.
Métodos
Realizamos auditorías en los supermercados y restaurantes de comidas rápidas de la comunidad para evaluar la ubicación y la disponibilidad de opciones alimenticias que permitan a las personas seguir las recomendaciones alimenticias fijadas por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (por ejemplo, consumo de frutas y verduras, opciones con bajo contenido
graso).Utilizamos datos del censo del año 2000 para evaluar la distribución racial y el porcentaje de personas que vive por debajo de la línea de pobreza federal en un área determinada de St. Louis, Missouri. Para determinar la agrupación espacial de los supermercados y de los restaurantes de comida rápida se utilizó una estadística de barrido espacial.
Resultados
La distribución espacial de los restaurantes de comida rápida y de los supermercados que brindan opciones que permiten cumplir con las recomendaciones alimenticias variaba de acuerdo a la distribución racial y a las tasas de pobreza. Las áreas en las que conviven diversas razas, las áreas de personas blancas con un alto índice de pobreza, y las áreas de
afroamericanos (independientemente de sus ingresos) tenían, en general, un menor acceso a alimentos que les permiten optar por una dieta más saludable que las áreas con una mayoría de personas de raza blanca y con mayores ingresos.
Conclusión
Si no se tiene acceso a alimentos saludables, las personas no pueden mejorar sus hábitos alimenticios. Si para reducir las enfermedades crónicas y promover la buena salud es necesario adoptar ciertos hábitos alimenticios, a menos que se aumente el acceso a alimentos saludables, algunas comunidades continuarán presentando disparidades en los principales resultados de salud.